la banda del limón arrollado...

Ir a ver a la Arrolladora, no sabia si reír o llorar

En ese momento no pregunté si los boletos se consiguen en un concurso de la “XLO (equiseleo) la rancherita”, o de “la Poderosa”, o van de regalo al cargar gasolina en el rancho de la Loza de los Padres, o los regala el Ayuntamiento de Huanímaro,  lo que si sé es que era inevitable zafarme.  Yo no quería ir, pero ellas me obligaron, y ahí voy yo, ni tan flojita, ni tan cooperando … mis amigas, la Arrolladora y yo??? Ja!, pa’ mis pulgas. 

Entramos a la explanada, después de que las mujeres policías me tortearan y se dieran gusto con mis carnecitas. Nos metimos entre la multitud para que un montón de nacos  me tortearan otra vez, se dieran gusto con mis carnecitas otra vez y me arrimaran el camarón: no se cuantas mil personas, es decir, un shingomadral de gente estaba ahí reunida para el tan famoso Baile de la Arrolladora. Y por el tipo de gente, hubiera jurado que estaba en un mitin de López Obrador y que en cualquier momento iban a empezar a repartir bolillos con crema y camisetas con la cara del Peje.  

Idea de Jessy: nos metimos entre la multitud y como trenecito nos colamos hasta adelante. Para abrirnos paso hubiera sido muy útil una pistola paralizadora, un lanzallamas con napalm o una espada de Star Wars, pero ninguna de las cuatro llevábamos nada de eso, finalmente llegamos a 20 metros del escenario # 2. Y… bueno, es que había 3 escenarios, en el escenario # 2 estaba tocando la banda el Coyote, o El Coyote y su banda, sí, creo que así era, y la única canción que reconocí fue esa que dice: “árrrrrrrboles de labarrrrrrranca, porrrrrrquenuan enverrrrdecido”, Luego hasta que dieron las 12, los del sonido pusieron el intro de “we will rock you” de Queen óseaaaaaaa, y a esa hora empezó a tocar la arrolladora, en el escenario #3, y como estábamos bien cerquita, solamente nos dimos media vuelta y ya quedamos de frente.

Yo ni me sé las canciones, y lo peor es nunca me imaginé que las iba a estar cantando…

 Niiiiiña de miiii coraaaaazooooonnnnnnn….

 Y es que no fue difícil, solo con escuchar el estribillo una sola vez tuve para cantar el resto de la canción… lo único que lamento es no haber llevado galletas de animalitos para cortarme las venas… vieras que las rolas están muy, pero muy, pero muy  llegadoras al alma.

 Ahora comprendo por qué a la gente le agrada ese género: no tiene ciencia, las letras son sencillas, hablan de amor y de despecho y solo están compuestas por dos estrofas que se repiten  y se repiten y se repiten y se vuelven a repetir toda la canción.

 Y quequedeclaroooooo que yaaaa eeeeeresssmiiiiia…

Eso si: el sonido era muy bueno, los clarinetes, trombones, tarolas y demás instrumentos se escuchaban perfectamente, y me percate de que todas las 38 canciones que cantaron se las saben de oído (sí, fueron como 38 canciones, cada una dura como dos minutos y medio), dudo que hayan ido a una escuela de música, jajja. La verdad no soy fanática de esas ondas, lo único que se me ocurría en ese momento era que para que dejaran de tocar, bastaba con ponerles la partitura para que la leyeran.

 Ya para el intermedio, la multitud nos había “empujado” hacia atrás, así que fuimos quedando cerca de la entrada (y de las cervezas) y en ese espacio ya se podía bailar.

 Debo confesar que me costó mucho ponerme en ambiente, porque la cerveza me la dejaron caer a $80 el vaso: Corona, pero al tiempo, así que me tuve que hacer a la idea de que esas cheves, las mas caras de mi vida, también tenían que ser las mas sabrosas y mas aún porque estas sí las estaba pagando yo.

 Y resulta que a mis veintidiez años aún tengo “rating”, porque varios me invitaron a bailar,  y  todos los que me invitaron estaban bien guapos … hasta que me dijo Vanessa que estaban re – gachos, y es que no veía, los lentes los dejé en mi casa pensando que entre el aventadero los podía perder.

Y a una compañera de trabajo la sacó a bailar una chava que se veía medio marimacha, y ella le contestó, ay no amiga que a mi me gustan las maracas, y yo me cagué de risa y le dije: - las maracas no  #%&ndeja,,. es la macana!!!!

 El humanista Abraham Maslow se me cayó del altar, mejor dicho, de su pirámide, ya que me dí cuenta de que la gente prefiere satisfacer su necesidad de autorrealización cantando las canciones de la banda, que satisfacer sus necesidades fisiológicas, y ya no digamos hacer del 1 o del 2, sino que muchos que trabajan aquí prefirieron comprar el boleto que cuesta $200 en lugar tener para comer esta semana.

 4:45 a.m. Vanessa Grisell, Jessica Denisse, Angie y Emmy, salimos del baile: medio borrosas y despeinadas, pero eso sí, lo bailado nadie nos lo quita!!!

 Cuando llegué a mi casa tenía la blusa rota de un lado, un chicle pegado en el cabello y las botas que me prestó mi hermana habían pisado quiensabequecosa pegajosa y de color morado. No me faltaron ganas de bañarme con el shampoo anti pulgas del perro y tallarme con una fibra para lavar cazuelas.

 Lo que más me preocupaba era que las canciones no me las podía quitar de la cabeza, por sus estribillos pegajosos y sus letras cursis. Así que tuve que programar mi música favorita en la compu para poder dormir a gusto, de no haber hecho eso, habría tenido pesadillas: mis sueños fabricados con las rolas de la arrolladora y los videos ridículos de bajo presupuesto que proyectaron en las pantallas… ay no, Dios líbrame.

Reflexiono ahora que los cholos, nacos, cumbiancheros y la raza en general también tienen corazón. ¡Si supieran con que pasión cantaban las canciones!. También tienen sentimientos y creo que hasta los podría considerar humanos (y yo? Muy fina?? Jajajja). No solo son unos entes no pensantes “nacotizados” por telerrisa, pareciera que sienten amor, despecho, desconfianza, cariño y palomillas en el estómago… no creo que lleguen a  mariposas, esas cuestan caras.

 La rola de hoy: aunque amanecí tarareando 19-2000 de Gorillaz, por las características de las rolas de la arrolladora (no tienen ciencia, todo se repite y duran dos minutos y medio), me recuerdan  cualquiera de Vive la Fete (ya sé que faltó el acento circunflejo, pero no sé como se pone),  y me gustan todas, excepto Nuit Blanche, esa la escuchaba mucho pero ahora cuando la oigo me imagino el comercial de Kotex.